Yo estoy en mi Padre, y ustedes en mí, y yo en ustedes. No es solo una “relación”, es verdadera y casi inexplicable comunión, solo puede ser entendida en el espíritu, revelada por el Espíritu. Son declaraciones de Jesús que los discípulos comprendieron tiempo después, cuando el Espíritu vino a morar en ellos, ya no solo sobre ellos, sino en su interior y para siempre, tal como se los prometió el Señor.
… el mundo no me verá más; pero vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis.
En aquel día vosotros conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.
El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él.
Señor, ¿cómo es que te manifestarás a nosotros, y no al mundo?
Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él. Juan 14.19-23
No pueden verlo, no pueden vernos
El sistema, el mundo y las personas que habitan “el sistema”, que conforman sistemas, formas de pensar, culturas, filosofías, no pueden verlo, no pueden vernos, a sus hijos, porque estamos en él.
Más que fe
En ese momento, ellos lo escucharon de la boca de Jesús, eso avivó su fe, sin embargo les dijo: En aquel día ustedes conocerán.
Ginósko: conocer, saber (absolutamente) reconocer, saber, sentir, tener, entender, informar, llegar (al conocimiento), cerciorar, comprender, conocer, conocimiento.
Lo que “se sabe” ya no se espera, es un estado de seguridad, se incorporó, es parte de nosotros.
Mora “con” y estará “en”
Han sido temas de controversia, innecesaria. Estaba con ellos, pero vendría para estar dentro de ellos, como estado superior.
os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros
Lo cierto, lo importante es que el Espíritu está en nosotros, está con nosotros, nos rodea, va delante, nos cuida por detrás. ¡Él siempre está!